Ser Semilla mi amor
- Juli Lacombe Cecco
- 26 sept 2018
- 1 Min. de lectura
El pulsar de una semilla. Todo ese potencial de vida a punto de nacer y despertar.
Ser semilla cuando nos reconocemos en el centro de la tierra, en el vientre de la madre. Tibios y húmedos

Ser semilla cuando el primer brote de valentía extrema conoció un nuevo mundo. Y checheo que aun así estaba a salvo. Ser semilla cuando el brote invitó a sus demás ramas a florecer también.
Ser semilla cuando danzamos la vida entre vientos tranquilos y algunas tormentas. Ser semilla aunque ya no reconozca mi nueva forma.
Ser semilla cuando me perdono por mutar y por ser producto de esta existencia. Ser semilla cuando no paro de soñar
Ser semilla cuando ya ando erguida y rodeada de árboles amigos. Todos con el afán de sostenerme. Ser semilla en la sorpresa de percibir que creciendo también fui sembrando. Ser semilla cuando reconozco que es hora de entregarse a tal innumerable cosecha
Ser semilla cuando ando frondosa y verde fresca. Cuando brindo una sombra placentera que invita al caminero a sentarse a mi lado. Ser semilla cuando ya abrazan mi corteza con brazos ampliamente extendidos. Esa corteza que ayer era tallo. Era yema suave.
Ser semilla cuando de tanto pulsar por el mismo camino y por esa verdad, un día llega la inminente necesidad de cambiar. Ser semilla para derrumbar todo lo que construí. Ser semilla para volver a hacerme bolita en el suelo fértil y aprender una nueva forma de amar. Ser semilla para volver a crear vida. Ser semilla para honrar el existir.

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